Después del encierro y del verano pasado con todas las restricciones, veo la forma de viajar y disfrutar del verano de forma diferente. Hemos intentado organizar un viaje a otro país pero me resulta imposible y tedioso, esperaremos a que todo esté bien de nuevo. Mientras tanto hemos descubierto otras opciones como el camping, tanto en la montaña como en la playa. La idea de sentirte libre en plena naturaleza rondaba en mi cabeza desde hace tiempo, empezamos comprando la tienda de campaña y algunos accesorios básicos para viajar sin preocupaciones. Poco a poco fuimos incorporando otros accesorios como, las sillas, la mesa plegable o una hamaca de las que se ponen entre dos árboles, algo que me fascina desde pequeño cuando iba al río de mi pueblo con mis padres y mis hermanos. Si bien es cierto que aquella hamaca no tiene nada que ver porque era muy simple. Encontré esta hamaca gigante en la tienda web de una marca que descubrí navegando por internet y se llama Tropilex. Un producto de alta calidad, tanto el estampado como los materiales son excelentes y además tiene ese toque retro que buscaba con el borde de cuerdas trenzadas y el material de tela que me recuerda a esas cortinas que hay en los pueblos de La Mancha. Nunca pensé que este fuera uno de los accesorios de camping que más iba a utilizar, las siestas son de otro nivel.