Chueca nunca dejará de estar de moda, aunque la comunidad LGTB+ nos hemos desplazado a los barrios de alrededor como Malasaña, Latina, Lavapiés o Plaza España… “hemos conquistado la ciudad”, o eso parece, tenemos mucho que agradecer a Chueca. No podemos olvidar que hubo un tiempo en el que el barrio era un autentico getto donde mucha gente podía vivir, sentir, amar sin miedo a ser insultados o apaleados. Hace unos días leía una noticia de unos neonazis que habían dado una paliza a un chico a la salida del metro de Chueca, sí en 2019 y en pleno Chueca. Hemos avanzado un poquito ganado derechos y saliendo del “getto” pero aun queda mucho por hacer. A veces creamos una burbuja en la que vivimos y pensamos que está todo resuelto, pero sólo hay que pararse a mirar un poco a nuestro alrededor en los pueblos, nuestros mayores, en el extra radio de la ciudades, para darse cuenta que es sólo una ilusión óptica de los gays que vivimos en el centro de las ciudades.